Celeste y blanca, inconfundible en su vuelo y valiosa por su aporte al ecosistema, la mariposa Bandera Argentina (Morpho epistrophus argentinensis) se consolida como un emblema de la biodiversidad regional. Declarada monumento natural en la provincia de Buenos Aires, su presencia refuerza la necesidad de políticas públicas activas para la protección ambiental.

Al respecto, la subsecretaría de Ambiente y Seguridad Alimentaria, Ivana Zecca, sostuvo: “Los espacios verdes no son un lujo, son una necesidad social y ambiental. Desde el Estado municipal asumimos el compromiso de cuidarlos, porque proteger la biodiversidad es cuidar la calidad de vida de los vecinos y garantizar un futuro sostenible para Gualeguaychú”.

En Gualeguaychú, esta especie puede observarse con frecuencia en las áreas naturales protegidas, especialmente en la Reserva Natural “Las Piedras”, ubicada a pocos kilómetros de la ciudad, así como en zonas ribereñas del río Gualeguaychú y arroyos afluentes. También se registra en otros espacios de resguardo, como el Parque Florístico, favorecida por la abundancia de plantas hospedadoras que garantizan su desarrollo.

Desde el Gobierno de Gualeguaychú, a través de Áreas Naturales Protegidas, se remarca la importancia de conservar esta especie única y de fortalecer el vínculo entre la comunidad y el entorno natural. En ese marco, se impulsan visitas guiadas y actividades de educación ambiental que promueven un disfrute responsable y consciente de los espacios verdes.

La mariposa Bandera Argentina no solo embellece el paisaje: interpela a una comunidad y a un gobierno que entienden que el cuidado del ambiente es una política pública central y una responsabilidad compartida.